Una vez más el Cuento del Tío tiene como víctima a una persona mayor, en este caso a una abuela que supera los 80 años, que afortunadamente no la agredieron, porque también hay que agradecer eso ahora.

De acuerdo a lo trascendido, la señora recibió un llamado telefónico de una supuesta sobrina, la que le decía que debía llevar dólares al Banco que allí la esperaban otros familiares.

La respuesta de la abuela fue,  que de esas cosas  ella no tenía ni idea, desconocía  si había o no dinero en la casa, (puesto que viviría con un hijo o sobrino); al dar esta repuesta,  se le indico  “hace una cosa tía, baja las cajas o fíjate en los placares en distintos lugares para ver si están ahí” – con este pedido,  la señora mayor respondió, “que era ya grande y que no se podía mover mucho”…

Ante esto, la supuesta sobrina le dice: -“deja no te preocupes tía el  gerente del Banco va a mandar a su hijo Gonzalo para que te ayude a buscar”

Así fue,  a los pocos minutos llaman a la puerta y un pibe jovencito se presenta e informa a la mujer el motivo de su presencia  dando a conocer además de parte de quien iba por lo que la abuela lo invita a pasar y que busque.

Una vez  dentro de la casa, no quedo caja, bolsa, bolso en los placares y muebles sin revisar, quedando un desorden bastante interesante y ante la ausencia del preciado “tesoro” el muchacho se retiró”.

Minutos más tarde arribo a la casa un nieto de la mujer y vio todo el lio, al consultar el motivo del mismo  la abuela  cuenta lo sucedido;  llaman a la sobrina quien les dice que no había hablado con la tía. Más tarde  llega el hijo de la señora y ahí se terminan de dar cuenta de lo que había pasado.

La mujer sufrió una descompensación motivo por el cual es llevada  al hospital para su atención retornando a su hogar horas más tarde..

Se da aviso a la policía quien saco fotos del lugar y les pidió que no tocaran nada que iban a ir los peritos a terminar su trabajo. Ante la ausencia de los mismos,(nunca llegaron), y para eso ya había terminado el partido de Argentina, los damnificados se acercaron a la Comisaria para conocer los motivos recibiendo como respuesta que, como no se había cometido el robo no iban a levantar rastros, lo que habría generado cierto malestar en la familia ya que alguien desconocido se les metió en la casa, les revolvió todo, afortunadamente,  nadie resulto lastimado.

Como dato a tener en cuenta, nos indicaron que tienen identificador de llamadas y que el último número que figuraba que se había comunicado era de Casares,  llamaron y del otro lado les respondió otra mujer, que por su voz parecía ya mayor y que ella no habría realizado ningún llamado.

Aguardamos el informe policial sobre lo acontecido y seguimos insistiendo que hablen con los mayores, que no dejen ingresar a ningún desconocido a la casa y que si los llaman  por teléfono, simplemente corten.