La Regional Henderson Daireaux de Aapresid realizó una jornada Un Productor en Acción (UPA) en la cual expertos abordaron retos en el control de malezas y aplicación de fitosanitarios con drones.

En julio último se llevó a cabo la Jornada UPA de la Regional Henderson Daireaux, en la Escuela Agraria N°1 Coraceros. La agenda del evento se centró en dos temáticas: el control de malezas abordado por Jorgelina Montoya (INTA) y la aplicación de fitosanitarios vía drones con la presencia de Agro Misión y DroneScope.

Malezas: Retos y claves para su control

Jorgelina Montoya inició la jornada subrayando la importancia de un control efectivo de las malezas. “Las malezas son una de las grandes limitantes que tenemos en la producción. Su manejo tiene que ser lo más efectivo posible, por todos los costos que implica” afirmó.

El momento de atacar a las malezas es crucial. ´´Puede ser previo a la emergencia, usando herbicidas residuales, o posterior a la misma, pero siempre teniendo en cuenta que la maleza tiene que tener un tamaño pequeño´´ explicó.

En su presentación, Montoya destacó que, en los últimos años, las especies que han generado problemas en la zona incluyen principalmente el complejo de las amarantáceas, con especial énfasis en Amaranthus hybridus y A. palmeri (Yuyo colorado), que se han vuelto especialmente problemáticas debido a su resistencia a herbicidas inhibidores de ALS y al glifosato. Además, resaltó la importancia de observar el flujo de emergencia, mencionando que a fines de septiembre y octubre suele verse el pico de aparición.

Presentó un ensayo de manejo de Amaranthus hybridus en barbecho químico a maíz. Los resultados mostraron que para poblaciones nacidas de Amaranthus, el control temprano con una mezcla de Glifosato + Fierce + 2,4D + Aceite fue efectivo. También recomendó el uso de mezclas de sulfentrazone + metolaclor para controlar la maleza en soja.

También abordó el control de Lecherón, indicando que este debe ser manejado cuando emergen los cotiledones, generalmente a fines de septiembre o principios de octubre. “Con glifosato solo, si está chiquita, la controlamos. Si ya tenemos plantas más grandes, debemos ir con glifosato + 150 cc de dicamba; o usar paraquat + diurón + Prometrina o Atrazina”, explicó.

Para el control de Cardo Ruso señaló su resistencia al glifosato y su alta competitividad. Los ensayos concluyeron que la mezcla de Glufosinato de amonio + 2,4D es efectiva, y puede implementarse en barbecho o dentro de una soja Enlist.

Sobre la Morenita, que nace muy temprano a la salida del invierno, recomendó el uso temprano de herbicidas residuales. Las mezclas que incluyen Fluroxipyr y 2,4D demostraron ser más efectivas. También se puede utilizar glufosinato de amonio + 2,4D.

En cuanto al control de Eleusine (Capín), Montoya indicó que esta maleza es resistente al glifosato y tolerante a cletodim, con flujos de emergencia dispersos a lo largo del verano. Para pre-emergencia recomendó Biciclopirone + S-Metolaclor y, para post-emergencia, una mezcla de glifosato + Haloxifop.

Finalmente, abordó el control de crucíferas, siendo la más común Hirschfeldia incana, que presenta resistencias al glifosato, 2,4D e inhibidores de la ALS, además de tolerancias al dicamba, picloram y clopyralid.

Tecnología: Aplicación de fitosanitarios vía drones

Agro Misión explicó el funcionamiento de la aplicación de fitosanitarios con drones destacando la importancia de factores como el tamaño de la gota, la altura de la aplicación, la velocidad del avance, la velocidad del viento, la temperatura y la humedad ambiental en la deriva de las gotas.

 “En aplicaciones con drones se logra penetrar mejor en cultivos cerrados gracias a la corriente de aire descendente generada por las hélices” explicaron desde la firma.

Luego, DroneScope destacó la posibilidad de realizar un vuelo preliminar para reconocer malezas y luego un segundo vuelo para la aplicación dirigida, lo que permite aplicar fitosanitarios solo donde se encuentran las malezas, optimizando así el uso del producto y reduciendo costos.