La Directora de la Chacra Experimental de Bellocq fue la anfitriona de la jornada de “Tranqueras Abiertas”, impulsada por el Ministerio de Asuntos Agrarios, destaco la importancia de contar con maquinarias para poder llevar adelante los diferentes ensayos y proyectos en la parte de agricultura como ganadería, destacando el trabajo que vienen desarrollando con las mujeres rurales por medio de la explotación ovina.

La Ing. Agr. Carolina Estelrrich, Directora de la Chacra Experimental de Bellocq, en dialogo con Casares On Line brindo detalles sobre los proyectos que trabajan en la chácara, remarcando: “por un lado, tiene la parte experimental donde realizamos ensayos… tenemos módulos productivos que tienen una escala que bien podría estar parecida a la de un productor mediano, chico. Puntualmente en el módulo agroecológico, que comenzamos hace tres años, donde lo que tratamos de hacer es ir de a poco hacia un menor uso de insumos, sino priorizar procesos en el suelo relacionados a suelo cubierto todo el año, con la incorporación de leguminosas para poder aprovechar el hidrógeno transferido  y la incorporación de la hacienda, donde las rotaciones son mixtas… lo que nos proponen estas rotaciones agroecológicas es por ahí tener cultivos quizás de invierno para cosecha y poder tener verdeos de verano, que pueden ser soja con girasol o maíz, siempre teniendo presente la incorporación de leguminosa”.

La importancia de las maquinarias

“Nosotros veníamos con una problemática relacionada a las maquinarias, que como no tenemos, dependíamos de los contratistas, que a veces cuando tenemos fracasos es difícil que las labores se hagan en el tiempo óptimo, en el momento que uno quiere. Y recién la semana pasada, gracias a un subsidio que recibimos de la provincia, pudimos comprar un rolo aplastador, que es un implemento para cortar el ciclo de las coberturas sin necesidad de aplicar agroquímicos, y un carpidor, que es una máquina que corta la raíz de las malezas en las descalzas sin remover la cobertura del suelo. Hoy hicimos un intento fallido probarlo, porque en realidad está súper seco. Las condiciones del suelo tienen que ser diferente.

Está súper seco el suelo y nada, el de arriba no se alineó con nosotros para la jornada, pero estamos en la expectativa de que las condiciones de humedad del suelo sean las adecuadas para poder probarlo. Y bueno, es fundamental también que los productores no solo puedan venir a consultarnos sobre algún resultado de ensayo o relacionar algún cultivo en particular, sino también ver qué maquinaria hay disponible para determinados planteos y cómo funciona y si da resultados. Porque a veces lo que no vemos, desconocemos y no tenemos cómo aplicarlo”.

Los percances de la sequia

“Hace seis años que estoy acá y es la primera vez que estamos en una situación realmente de mala cosecha de gruesa. En general, hemos tenido algunos períodos de alguna falta de agua y de inundación, pero no nos ha determinado demasiadas complicaciones en cuanto a rendimiento o posibilidades de cosecha. Hoy la situación es realmente compleja, pero bueno, si uno mira, yo les contaba la serie histórica de precipitaciones acá en la chacra desde 1940, es como un electrocardiograma. En el campo, sabemos que es así, tenemos que producir a cielo abierto, que hay cuestiones del tiempo que no las podemos manejar y son riesgos que asumimos y que de alguna manera también eso nos da como este espíritu de siempre volver a empezar. Nosotros ahora no hemos podido sembrar ni pasturas ni verdeos, estamos como expectantes, que se revierta la situación para poder dar comienzo a nuevos cultivos. Es un riesgo más el climático que se suma a otros montones de riesgos, pero creo que es lo único que sabemos hacer, producir”.

Cría ovina y el trabajo de hilado con la mujer rural

En el año 2020, gracias a un proyecto de la Ley Ovina, que es una herramienta estatal que está al alcance de todo productor que quiera iniciarse o mejorar su producción ovina, obtuvimos el crédito y comenzamos con un módulo… en principio los objetivos eran tener un producto más y generar información en cuanto al manejo de la majada. Y bueno, resultó ser un proyecto que nos abrió otras cuestiones, porque hoy en día también estamos trabajando en un centro de acopio de lana con capacitaciones para que chicos se formen en esquila y acondicionamiento de lana… también surge la posibilidad de dar talleres de hilado de lana.

En el año 2021 se hicieron talleres acá y en otras localidades, siempre priorizando o tratando de llegar a las localidades pequeñas de los partidos. Y se despertó un interés muy grande, mayoritariamente mujeres que acudieron a esos talleres. Entonces, junto con la técnica Laura Arispe, del INTA de Carlos Casares, y Malena Coliqueo, del  INTA de Pehuajó. Empezamos a trazar o querer formar una red de mujeres en el entorno al hilado de lanas…

Es así que en agosto del año pasado se formó esta red, son más de 30 mujeres que pertenecen a la ruralidad de Carlos Casares, Nueve de Julio, Pehuajó y Bolívar, que se reúnen según cercanía geográfica todas las semanas a hilar. Para esto contamos con la colaboración de instituciones educativas como los CEPT, de Casares, en Magdala de Pehuajó, un CEA que hay en Ibarra de Bolívar. El Centro Cultural Ordoqui también presta sus instalaciones y cada tres meses vuelven todas a la Chacra para continuar con la capacitación…”

La importancia del valor agregado

“La verdad que es una actividad muy interesante del ingreso, porque le damos un valor agregado a lo que se produce acá. La realidad es que hay experiencias en la provincia de mujeres que hilan y tejen, pero muchas terminan trayendo lana del sur. Nuestro desafío es poder agregarle valor a la lana que está acá, que el productor no sabe qué hacer. Y también, a partir de la utilización de la lana, ir hacia atrás y que el productor vea que hay alternativas para afinar la lana sin resignar calidad de carne, que hay ciertas cuestiones de manejo que hacen a la calidad de la lana en momentos en que se esquila, la cantidad de materia vegetal, de abrojo, de chinchillas que tenga la lana.

Más allá de todo eso, ha resultado súper gratificante porque les brindamos un lugar de encuentro a la mujer rural, que hoy uno podría decir bueno, que Internet estamos todos conectados. Y sin embargo, evidentemente, hace falta estar en el momento presente y los encuentros son súper gratificantes porque agradecen esto, juntarse con otra mujer,  poder charlar, poder salir de su diaria, porque en general la mujer en el campo está más bien destinada a tareas de reproducción social, a la casa, a alimentar a sus hijos… Esto es como que abrió un mundo y brinda una oportunidad que a nosotros la verdad nos enorgullece y esperemos seguir acompañándolas hasta que efectivamente logren comercializar la lana hilada” remarco Estelrrich.