El director de la Estación Experimental Bariloche, Mauro Sarasola, contó que tuvo resultados

Una vacuna argentina desarrollada por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) tuvo resultados preliminares “buenos” y el proyecto recibirá financiamiento del laboratorio Bagó.

El director de la Estación Experimental Bariloche, Mauro Sarasola, contó que en el proyecto trabajan investigadores del INTA y de Conicet, y que “resultados alentadores de las primera etapa de investigación despertó el interés del laboratorio argentino Bagó”.

La investigación ya contaba con el financiamiento del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, y que ahora también aportará el laboratorio privado. “Se firmó un convenio donde el INTA pone el conocimiento y el know-how y la compañía el financiamiento”, explicó Sarasola en diálogo con Radio Provincia.

El investigador indicó que la vacuna utiliza una “nanoplataforma que puede llevar antígenos a la células, para llevar el antígeno del Covid-19, y promueva la  respuesta inmune en el cuerpo humano”.

Sarasola indicó que ya se realizó la etapa 1 con ratones, y que ahora se llevarán adelante la 2 y la 3 (también con animales). “Queremos ser cautelosos. Los resultados premilitares son buenos pero vamos a ir monitoreando el avance y entre uno o dos años vamos a saber si se puede llegar a una nanovacuna o sino servirá para conocer más sobre la enfermedad”, agregó.

A través de un comunicado, desde el Instituto indicaron que “con la utilización de la plataforma de nanovacunas direccionada a las células dendríticas –células específicas del sistema inmunológico– que el INTA Bariloche viene trabajando desde hace años con universidades de Estados Unidos e Italia, se podrán obtener datos y conclusiones que ayudarán a comprender la respuesta inmune en animales de laboratorio que puedan extrapolarse luego al ser humano, en vistas a una posible nanovacuna”.

 “El convenio con Laboratorios Bagó considera nuestra experiencia como grupo de investigación en el direccionamiento de nanovehículos hacia células dendríticas, que involucra una molécula sintética que se ancla específicamente a un receptor de estas células que tienen un rol fundamental en la regulación de la respuesta inmune”, agregó Sebastián Pappalardo, responsable del proyecto. (DIB)