Un estudio asegura que el cierre de escuelas es la segunda medida más importante para frenar contagios. Lo afirma un trabajo de investigación estadística publicado en la revista científica Nature.

Los detalles del estudio

En medio del debate por la suspensión de las clases presenciales en Argentina y otras partes del mundo debido al aumento de casos de coronavirus, un estudio publicado en la revista científica Nature asegura que el cierre de las escuelas es la segunda medida más importante para la reducción de los contagios.

El trabajo de investigación estadística posiciona al cese de actividades en las instituciones educativas en segundo lugar, con 73% de contribución a la reducción de R, es decir, el número que indica a cuánta gente puede contagiar una persona infectada por SARS-CoV-2.

El relevamiento, que se realizó en 79 territorios y luego fue validado con datos externos de 226 países, tenía por objetivo realizar un ránking de la efectividad de las medidas de intervenciones no farmacéuticas (NPI) puestas en marcha por los gobiernos para frenar la propagación del virus.

El cierre de escuelas fue identificado como la segunda medida más importante para frenar contagios

El cierre de escuelas fue identificado como la segunda medida más importante para frenar contagios

Según informó el Ministerio de la Nación, que difundió los resultados del estudio, se analizaron más de seis mil medidas implementadas, entre las que se encuentran las restricciones de viaje, el distanciamiento social, medidas de protección personal, autoaislamiento, cierre de escuelas y prohibición de eventos públicos, entre otras.

Así, el relevamiento llegó a la conclusión de que es necesaria una combinación adecuada de NPI para frenar la propagación del coronavirus. “Las medidas menos disruptivas y costosas pueden ser tan efectivas como las más intrusivas y drásticas (por ejemplo, un bloqueo nacional)”, estableció, aunque aclaró que siempre depende tanto del contexto local como del momento de adopción.

En cuanto a las medidas más efectivas, se encontraron 6 categorías que muestran mayor impacto en R: cancelaciones de reuniones, cierre de instituciones educativas, restricciones fronterizas, mayor disponibilidad de equipo de protección personal, restricciones de movimiento individual y bloqueo nacional.

Específicamente sobre las escuelas, el trabajo explica que estudios previos no le atribuían a esos ámbitos el efecto de propagación del virus, pero que la evidencia actual indicó que su cierre en Estados Unidos se asoció con la reducción de la incidencia de coronavirus y la mortalidad en un 60%. A la vez, en Corea del Sur se identificó a los adolescentes de 10 a 19 años con más probabilidades de propagar el virus que los adultos y los niños en entornos domésticos.

En conclusión, el estudio pondera que debe haber un equilibrio entre las medidas radicales y de menor impacto para evitar consecuencias adversas, ya que las menos drásticas también pueden fomentar un mejor cumplimiento por parte de la población.

 “Demostramos que las medidas más efectivas incluyen cerrar y restringir la mayoría de los lugares donde la gente se reúne en cantidades mayores o menores durante períodos prolongados (negocios, bares, escuelas, etc.). Sin embargo, también encontramos varias medidas altamente efectivas que son menos intrusivas. Estos incluyen restricciones en las fronteras terrestres, apoyo gubernamental a poblaciones vulnerables y estrategias de comunicación de riesgos”, señala.